Casas Canadienses

Dentro del mundo de las casas de madera, podemos distinguir varios tipos de viviendas en función del sistema constructivo empleado para edificarlas. Las llamadas casas canadienses responden a un tipo de construcción que lleva en vigor desde hace unos 200 años, y sigue siendo el más utilizado en Canadá, Estados Unidos y el norte de Europa. La distinción se refiere principalmente al modo de construcción, no al estilo o diseño de la vivienda.

Las casas de madera canadienses tienen una estructura de madera, levantada a partir de una cimentación de hormigón. Por lo tanto no son casas móviles, sino bienes inmuebles con el mismo estatus legal que las edificaciones convencionales, hipotecables y asegurables. Su diseño evita que la madera entre en contacto con la humedad, mediante un sistema de fachadas y cubiertas ventiladas, forjados sanitarios y barreras de vapor que garantizan la resistencia y durabilidad de la vivienda.

Sobre la base de un muro de cimentación de hormigón se levanta la estructura de la casa, hecha íntegramente de madera (aunque a veces se combinan el hierro y el acero galvanizado): las vigas de planta, la estructura de los muros exteriores, el forjado de cada planta. En un sistema de construcción no prefabricado, hay una gran libertad en cuanto a diseños, medidas, alturas o acabados, que se adaptarán a nuestros gustos, necesidades y presupuestos.

Las casas de madera canadienses destacan por su capacidad de aislamiento térmico y acústico, lo que puede suponer un importante ahorro energético. La conducción térmica de la madera es mucho menor que la del acero, el ladrillo o el hormigón. Puede combinarse además con cámaras de aire y con aislamientos de lana mineral. El grosor de los muros se reduce en comparación con los de las viviendas convencionales, con lo que ganamos superficie habitable.

La estructura de madera se recubre con revestimientos y acabados de exterior e interior en los materiales que prefiramos: ladrillo, piedra, madera, estucos, lamas, azulejos. Estas casas no requieren de ningún mantenimiento especial, distinto del de una vivienda de otro tipo, a diferencia de aquellas con revestimientos de madera. Al tratarse de un entramado ligero, los costes se reducen desde la misma construcción, ya que la cimentación tiene que soportar un peso menor y eso supone un ahorro notable.

Las casas de madera canadienses o americanas se construyen a partir de un modelo muy versátil, lo que ha permitido adaptar este tipo de construcciones a todo tipo de diseños, ubicaciones y materiales. Son una opción interesante para aquellos que se plantean habitar una casa de madera, especialmente si buscamos una vivienda de gama alta y queremos combinar la madera con otros materiales. Diseño, ecología, durabilidad, economía y calidad se dan la mano en las casas canadienses.